¿Se nace o se hace, la gente con clase?

¿Se nace o se hace, la gente con clase?. Lamentablemente vivimos un momento en el que se han perdido muchos valores, no paro de reivindicarse, pero creo que estaréis conmigo al igual que gran cantidad de filósofos y sociólogos, historiadores y pensadores.

Considero que la cortesía social, debe seguir existiendo, el respeto a los derechos ajenos y el conocimiento de los sacrificios que las relaciones sociales imponen al amor propio, sólo de esta forma llegaremos a alcanzar esa imprescindible necesidad de concordia y de afecto. Y con esto vengo a decir, que no tiene por qué depender en gran medida de la posición social o el poder, bajo mi punto de vista, pues no es necesario ser educado en un colegio de élite para ser cortés y educado.

Otro aspecto importante es la presencia, desde luego si dijera que no, me estaría engañando, ya que siempre he pensado que es fundamental ser una persona bien alineada y cuidadosa con la propia imagen, pero no por ello vais a ser más caballeros, evidentemente un verdadero caballero lo sigue siendo incluso sin tener que lucir sus mejores galas.Siempre tengo presente en mi mente una preciosa frase que rescaté de Carolina Herrera y que me caló muy hondo, que dice…

“La educación es el mejor vestido de gala para la fiesta de la vida”.

Por otro lado, pienso que tener clase es un don que otorga la madre naturaleza, sin pretenderlo y además lo concede a determinadas personas, en cierto modo es como una reservada seducción que emiten algunas personas a través de su forma natural de ser y estar. Este don es más fascinante de lo que parece, pues implica tener un talento especial, que nace en el interior de la persona, por suerte y a pesar de los tiempos que corren, me tranquiliza pensar que todavía existen seres privilegiados en este sentido: tanto si es un obrero, como si se trata de un genio de la moda, un famoso o un médico.

Es importante esta apreciación, pues a todos ellos les une una característica fundamental: son extraordinariamente buenos en su oficio o profesión y cumplen, desde luego, con su deber sin darle mayor importancia. Estos, suelen tener un aura estética propia, que se aprecia por la forma de mirar, de hablar, de vestir, de guardar silencio, de caminar,de escuchar, de estar sentados, de sonreír, de permanecer siempre en un discreto segundo plano, sin rehuir nunca a la ayuda a las personas que les necesitan, alejados siempre de formas agresivas y ademanes estridentes .

¿Se nace o se hace, la gente con clase?

Definitivamente pienso que se nace con clase, afortunadamente hoy en día la figura de los coach,como bien indica su nombre, ayudan o entrenan en ello, logrando alcanzar objetivos pero es fundamental la predisposición y el interés por superarse día a día y mejorar, en estos casos, estos especialistas están ejerciendo una gran labor, por ello los alabo, actualmente estoy muy introducida en esta área, la cual me apasiona y ocupa gran parte de mi tiempo.

Autora: Ana Ponce Ponce
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