Las emociones: cómo reconocerlas y cómo comportarnos ante ellas

Cada día es como las personas, diferente al resto y único. Hoy miércoles, no se parece al miércoles que vivimos la semana pasada, ni tampoco será igual que cualquier otra fecha de nuestras vidas. Tanto los días como cada individuo estamos caracterizados por una serie de experiencias, de aprendizaje, enclavados en una época determinada, y sobre todo llenos de EMOCIONES.

Recientemente, gracias a Disney y Pixar, y de la mano de los directores Pete Docter y Ronaldo Del Carmen, contamos con la película ''Del revés'' (Inside Out) la cual nos explica cinco tipos de emociones específicas que los seres humanos poseemos, ellos son tristeza, alegría, ira, asco y miedo. Dichas emociones son explicadas de una forma clara y sencilla, además no les ponen etiquetas como buenas o malas, error que cometemos todos a la hora de identificarlas. Ahora bien, ¿sabemos qué son y cómo funcionan?

• La tristeza se desencadena ante una separación o pérdida, un fracaso o dolor. En el caso de no ser aliviado podríamos sufrir aflicción y depresión. Su función es intentar realizar conductas para cambiar el ambiente actual al estado en el que estaba antes.
• Alegría intenta resolver o aliviar estados negativos, surge en acontecimientos positivos y momentos en los que sentimos valía. Hace que la vida sea más agradable y facilita la participación en actividades sociales.
• La ira nace en situaciones que no son como deberían ser, se activa por frustración debida a cambios de planes o metas, incluso cuando incide en el propio bienestar, por ejemplo cuando nos hieren o engañan. Esta emoción trabaja para recuperar el control perdido sobre la situación.
• Sentimos asco ante estímulos desagradables. Nuestro cuerpo los rechaza de manera que huimos, cambiamos hábitos y conservamos el entorno limpio.
• El miedo es la percepción de peligro o daño tanto físico como psicológico. Reaccionamos de forma defensiva, protegiéndonos y evitamos situaciones que nos suponen una amenaza. Por otro lado, hay conductas de afrontamiento que nos ayudan a aprender nuevas respuestas ante ese riesgo percibido.

Las emociones: cómo reconocerlas y cómo comportarnos ante ellas

Ahora bien, ¿sabemos cómo tenemos que comportarnos ante una persona enfadada?, ¿y triste? Con toda la buena intención solemos soltar un ''no llores'' ante una persona que simplemente necesita desahogarse, o ''no tengas miedo que no pasa nada'', y tal vez para esa persona sí pase y sí es importante. El cuerpo humano es sabio, tiene sus propios mecanismos de respuesta y defensa, y si éstos salen a la luz es porque hay un motivo detrás. No nos paramos a pensar que somos un reflejo, como un espejo, y tanto nuestras acciones como nuestras palabras inciden en la otra persona.

Ante una persona llena de rabia o ira lo mejor es no entrar en el mismo estado emocional en el que él o ella se encuentra, ya que en ese momento esa persona ni nos está escuchando activamente lo que intentamos decirle ni tampoco lo razonará. Tampoco es aconsejable burlarnos de su conducta ni intentar discutir porque caeremos en una espiral de reacciones incontrolables.

Lo mejor en estos casos es pensar que tenemos una pizarra delante y esa persona está escribiéndonos como se siente y que le está ocurriendo, por lo que no debemos tomarlo a la defensiva ni de forma personal, todo lo contrario, debemos mostrar empatía, entender lo que nos dice, incluso ver el trasfondo que éstas actitudes conllevan y ayudarles una vez pasada esa emoción.

Al igual ocurre con una persona triste, debemos dejar que llore, que no quiera salir de casa...al final el objetivo es que se desahogue de la forma que sea más efectiva para esa persona, sin que llegue a convertirse en crónico. Solamente la compañía o un gesto de cariño a veces es suficiente para esa persona porque cuando necesite hablar nos buscará.

Debes saber que...las emociones son sanas, y todas son positivas porque todas tienen su función y su objetivo por lo que debemos sentirlas, expresarlas y saber identificarlas para trabajar en ellas.